Las “sesiones gemelas” de China se abren mientras Xi Jinping busca más poder
Las sesiones del CNP/CPPCC son una gran noticia para los multimillonarios: malas noticias para los trabajadores y Hong Kong
Escrito por Vicente Kolo, chinaworker.info
Las “sesiones gemelas” de China o Lianghui, las reuniones anuales de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CPPCC) y el Congreso Popular Nacional (NPC), comenzaron en Beijing el jueves 4 de marzo.
Ninguno de los dos cuerpos tiene ningún poder real. Son simplemente adornos decorativos para el régimen dictatorial del llamado Partido Comunista (PCCh), que se ha convertido cada vez más en una dictadura unipersonal bajo el líder supremo Xi Jinping. El CNP y el CPPCC son vigilados de cerca principalmente porque aquí se anuncian nuevas políticas importantes, trabajadas con mucho antelación por Xi y sus principales asesores, con los más de 5,000 delegados aplaudiendo salvajemente.
Los legisladores más ricos en 2018.
En las últimas dos décadas, la increíble riqueza de los capitalistas chinos que se duplican como delegados en el Lianghui ha sido el centro de mucha atención. Este año se ha establecido un nuevo récord. Los capitalistas más ricos que asisten a los Lianghui han visto crecer su fortuna en un promedio de 68 por ciento en los últimos doce meses, según una lista de los principales multimillonarios publicada por Hurun Report con sede en Shanghai. Estos delegados tienen un valor combinado de 391,000 millones de dólares, más que el PIB de Hong Kong en 2020 (349,000 millones de dólares).
Lee El capitalismo y el Estado chino – Alternativa Socialista
El año pasado, a pesar de la pandemia y los paralizantes encierros a principios de año, China creó cinco nuevos multimillonarios cada semana. China “se aleja de Estados Unidos”, informó Hurun, con 1,058 multimillonarios chinos frente a los 696 de Estados Unidos. El centenario del PCC, que cae el 23 de julio, verá al régimen de Xi realizando contorsiones políticas para oscurecer la realidad de que el carácter de clase y la política de los comunistas de la década de 1920 eran el polo opuesto de la oligarquía capitalista del PCC de hoy.
¿Repunte económico?
Después de todo, el CNP adoptará un objetivo del PIB para 2021, aunque muchos analistas creían que la práctica sería abandonada como lo fue el año pasado. El objetivo de este año será “por encima del seis por ciento” que la mayoría de los observadores consideran conservador y una adaptación para lograrlo. La previsión promedio para el crecimiento de China en 2021 entre los economistas encuestados por Bloomberg fue de 8.4 por ciento.
China tiene la distinción de ser la única economía importante en crecer en 2020, aunque al ritmo más débil desde 1976. Como siempre ocurre, se ha utilizado alguna manipulación estadística. Aún así, según las cifras oficiales, la economía china creció un 2.3% el año pasado, mientras que la de Alemania se contrajo un 5% y Estados Unidos un 3,.%. Si bien el crecimiento del PIB del 8 por ciento o más sería llamativo, el crecimiento de este año se verá halagado por el bajo efecto base a partir de 2020. Si combinamos los dos años 2020 y 2021, a pesar de tal repunte, la tendencia general es una de desaceleración continua de las elevadas tasas de crecimiento de dos dígitos de hace una década.
Los trabajadores no están ganando con esta “recuperación”. Por primera vez desde 2009, ni una sola provincia china aumentó el salario mínimo el año pasado. Todo indica que esta congelación salarial se extenderá en 2021. El gobierno también se prepara para lanzar un gran ataque a los derechos de pensión, atacando a las trabajadoras como primer paso al elevar la edad de jubilación femenina de 55 a 60 años para lograr la “igualdad” con los hombres. Esto se debe a que China se enfrenta a una bomba de tiempo demográfica de caída de las tasas de natalidad y una fuerza laboral cada vez menor.
Los fondos de pensiones del gobierno ya se están agotando. Se espera que casi la mitad de las 32 provincias y regiones de China reporten déficits en sus fondos de pensiones para 2022, en comparación con seis en 2015, según un informe de la Academia china de ciencias sociales. Pero este problema puede desatar grandes disturbios. Una encuesta en 2012 mostró que el 95 por ciento de los encuestados estaban en contra de aumentar la edad de jubilación.
En 2027, la India está inclinada a superar a China como el país más poblado del mundo. La disminución de la fuerza laboral de China , que se prevé que disminuya de 759 millones a 661 millones entre 2017 y 2037, tiene serias implicaciones para la economía y los planes del PCC de superar a Estados Unidos como la economía número uno del mundo y la superpotencia militar.
Otra crisis en ciernes se refiere a los galopantes niveles de deuda. La deuda combinada del sector público, las empresas y los hogares de China aumentó al 280 por ciento del PIB en 2020, frente al 255 por ciento del PIB en 2019, según el Banco Popular de China (banco central). Esto se eleva a alrededor del 295 por ciento del PIB cuando se incluye la deuda externa (que el BPC estima que es del 14.5 por ciento del PIB). De ello se deduce que el modesto crecimiento del 2.3% de China en 2020 se logró gracias a su mayor aumento de la deuda. Esto no es sostenible.
Lucha de poder
La característica más importante de las sesiones gemelas de este año no serán las “decisiones” políticas principales, sino el empuje de la facción gobernante de Xi Jinping para consolidar aún más su poder. Hay una lucha de poder en curso dentro del PCCh-estado y Xi está presionando duro para sellar su control, preparando el camino para que gane un tercer mandato en una reunión clave de liderazgo el próximo año, posicionándose para convertirse en gobernante de por vida.
La concentración cada vez mayor de poder de Xi y su abandono de los límites y controles internos introducidos por el régimen de Deng Xiaoping en la década de 1980, para establecer un sistema autoritario más “colectivo”, es un signo de grave crisis. Las políticas de Xi están avivando enormes presiones en la sociedad a medida que aumenta exponencialmente la represión (como lo demuestra la represión en Mongolia Interior y Hong Kong en el último año) y el descontento entre la clase trabajadora está creciendo a medida que caen los salarios reales. Esto es especialmente cierto para los trabajadores migrantes que constituyen dos tercios de la fuerza laboral de cuello azul de China.
Los conductores de la empresa de reparto de alimentos Meituan han convocado una huelga para el lunes 8 de marzo, exigiendo un aumento salarial y mejores condiciones. Esto sigue a la detención el mes pasado de Xiong Yan, un conductor de la plataforma de entrega rival Ele.me. Xiong está acusado de formar un sindicato no oficial para los trabajadores de la entrega. La dictadura china tiene una política de tolerancia cero hacia los sindicatos independientes.
Hong Kong
Las sesiones gemelas respaldarán un nuevo sistema político para Hong Kong, que marcará el clavo final en el ataúd para la limitada democracia parlamentaria de la ciudad o más precisamente “semidemocracia”. El gobierno autoritario endurecido es el plan del PCC para el futuro de la ciudad. El encarcelamiento esta semana bajo la Ley de Seguridad Nacional de Xi de más de 40 políticos prodemocráticos a la espera de juicio por “subversión” en una fecha posterior no especificada fue claramente organizado en beneficio de las reuniones del CNP y el CPPCC en Beijing. Escenas judiciales caóticas y brutales en Hong Kong — con varios acusados desmayándose por el agotamiento mientras el proceso se extendía a lo largo de la noche — están diseñadas para mostrar el poder del régimen de Xi, su desafío a la “intromisión” estadounidense y occidental, y para enviar una advertencia a todos los que desafiarían a Xi, ya sean trabajadores en China tratando de organizarse por los derechos básicos, o los rivales de facciones de Xi en el PCC que están cada vez más inquietos por la dirección que el Estado ha tomado.
Lee más Ley de seguridad nacional: la “opción nuclear” de Xi Jinping – Alternativa Socialista
La última represión elimina y encarcela a todo el campo de los candidatos de la oposición para el falso parlamento de Hong Kong, el Consejo Legislativo (Legco). En su discurso de apertura ante el CNP el 5 de marzo, el primer ministro de China, Li Keqiang, no hizo ninguna mención a “un país, dos sistemas” o “pueblo de Hong Kong que gobierna Hong Kong”, dos frases previamente clave para describir la limitada autonomía que se ofrecía en el pasado cuando la ciudad pasó del dominio colonial británico al gobierno de China. Esta terminología ha sido descartada por Pekín a favor de subrayar “la soberanía de China” y “sólo los patriotas pueden gobernar Hong Kong”, esto último significa sólo partidarios del PCC, y descalifica a cualquiera sospechoso de inclinaciones democráticas.
Se espera que el CNP apruebe un nuevo sistema de votación para Hong Kong, que elimina aún más cualquier posibilidad de que la dictadura pierda el control del Legco o se vea obligada a dar cabida a representantes de la lucha por la democracia. Las elecciones de Legco que se suponía que se celebrarían en septiembre pasado se pospusieron hasta 2022 y el Comité Electoral elitista pro-PCC que elige al Jefe del Ejecutivo cada cinco años se amañará aún más a favor de las fuerzas pro-PCC y se les darán nuevos poderes para designar o vetar a los candidatos de Legco.
Hay señales de que Xi no dejará de purgar a la oposición democrática en Hong Kong, sino que también presionará para reconstituir y purgar el campo progubernamental. A los ojos de Pekín, los partidos pro-PCC son incompetentes y no han logrado gobernar Hong Kong en su interés. Los magnates empresariales tradicionales de Hong Kong también pueden perder algunos de sus privilegios políticos, ya que ellos también son vistos como insuficientemente celosos al hablar en nombre de Pekín. Una toma de control completa por parte del PCC y sus compinches empresariales, con la limitada autonomía de Hong Kong anulada, está procediendo rápidamente bajo la dirección de Xi.
De acuerdo con las políticas de Xi en otras áreas, la represión y el gobierno de línea dura reemplazan el compromiso y la construcción de puentes. Las perspectivas de los frágiles derechos democráticos de Hong Kong parecen extremadamente sombrías, pero al mismo tiempo las políticas de Xi están avivando la ira masiva y la radicalización política, que no pueden ser reprimidas indefinidamente por las medidas policiales.
Al duplicar continuamente las políticas represivas de línea dura, mientras que una política económica insostenible impulsada por la deuda causa cada vez más dolor económico a la clase trabajadora, el régimen de Xi está creando un futuro explosivo.
