¡Zacatecas, escucha: el gremio de la salud está en lucha!
La situación laboral en la que trabajan médicos y enfermeras para los servicios de salud a nivel nacional es precaria. La pandemia ha sido un parteaguas pues ha hecho aún más evidente la falta de insumos médicos que existe en las dependencias. A ello se agrega la inestabilidad laboral y la competencia entre las instituciones de salud federales y estatales, que deterioran aun más las condiciones laborales de las y los trabajadores de salud.
Escrito por Sebastián Lorea Flores, Alternativa Socialista (ASI en México).
La situación laboral en la que se ven envueltas y envueltos quienes trabajan para los servicios de salud a nivel nacional es precaria. La pandemia ha sido un parteaguas principalmente porque se hizo aún más evidente la falta de insumos médicos que existe en las dependencias. Aunado a la situación laboral de las y los trabajadores de la salud quienes laboran en distintas condiciones. Que van desde el contrato temporal, las suplencias (de mayor mayor estabilidad que la primera sin ser definitivo, ambas sin ninguna prestación) y las formalizaciones, una forma para denominar y al mismo no llamar así a las basificaciones.
Desde la cúpula patronal se planifico establecer un nuevo lugar de trabajo, denominado Hospital de la Mujer Fresnillense HMF, mismo que a la par de brindar servicios básicos para este sector de la población, ayudaría a albergar a nuevas y nuevos trabajadores del sector salud estatal, con un aproximado de trescientas nuevas formalizaciones para quienes trabajan para el Instituto de la Salud para el Bienestar INSABI y para los Servicios de Salud de Zacatecas SSZ. El problema inicia cuando la desde esa misma cúpula, en sus mezquinas formas de obrar, no considera en sus decisiones a las y los trabajadores, tomando por hecho el donar el nuevo lugar de trabajo al IMSS. Lo que contravendría a los intereses de las enfermeras que trabajan para INSABI y SSZ, ya que el IMSS, por trabajar con un sindicato diferente –el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social SNTSS-, maneja un contrato diferente al del INSABI y SSZ –cuyos trabajadores son representados por el contrato colectivo del Sindicato Nacional de Trabajadores del Sector Salud SNTSA-.
El objetivo es hacer chocar los intereses de la misma clase trabajadora, que se han bifurcado en este contexto por la representación del SNTSS y por el SNTSA, en donde han sobresalido los intereses de las burocracias sindicales y la patronal contra las bases. Aunque debería de hacerse un llamado a la unidad de ambos sindicatos, no pueden convenir en acuerdo por las diferencias estructurales que existen desde sus fuentes de trabajo. El problema estriba en la arrogancia de entablar decisiones sin considerar a las y los trabajadores, siendo este acontecimiento un ejemplo más de ello.
Ha sido el día 11 de junio de 2021 cuando estas situaciones colmaron a las bases. Surgió todo con la decisión de establecer un plantón en Ciudad Administrativa, lugar donde están las principales dependencias del gobierno estatal, donde se hizo el llamado a los medios locales para transmitir lo que aqueja al sector que trabaja bajo condiciones precarias tanto para el INSABI como para los SSZ. Es imprescindible señalar que quienes se reunieron ahí son en su mayoría trabajadoras y trabajadores que están en contrato temporal y en suplencias, ambas partes sin ser parte del sindicato, así como una pequeña pero alentadora minoría de basificadas, quienes son representadas por el sindicato y asistieron para apoyar y solidarizarse con la causa de sus compañeras. La dirigencia del SNTSA no hizo presencia, se ha guardado desde la soberbia de sus escritorios para persuadir a las bases de que están trabajando en acuerdos con la patronal, de que poco a poco van solucionando esta situación que aqueja a quienes tienen una voz insonora en el sindicato.
El plantón se mantuvo con discreción y pasividad, pero sin hacerse notar y hacer evidentes sus necesidades. Es por esto que un ala del plantón se decidió por tomar la principal avenida que comunica a la capital del estado, bloqueándola del tránsito automovilístico para así llamar aún más a los medios y que se socializara la información que en su urgencia quieren transmitir a la población, pero sobre todo, para exhibir la inoperancia de las autoridades. Se logró tomar el boulevard principal, lo que no fue suficiente, ya que obligó a que se emprendiera una marcha desde Ciudad Administrativa hasta la plancha de Plaza de Armas, en el centro de la capital. Las consignas que se gritaban iban desde el ¡No a la donación!, –donación del HMF por los SSZ al IMSS-, el ¡Fuera Tello!, –contra Alejandro Tello, quien todavía es gobernador del estado-, ¡Fuera Breña!, –en contra de Gilberto Breña Cantú, actual Secretario de Salud de Zacatecas- ¡Bonos COVID!, -un beneficio económico dirigido desde la Federación a las y los trabajadores de este sector, mismo que no ha sido dado-, ¡Pueblo, escucha: el gremio está en su lucha!, y el de ¡Basificación!, -exigiendo con esto la formalización de su trabajo-.
Al concentrarse en Plaza de Armas se logró entablar una mesa de diálogo, misma que se hizo con el secretario del secretario del gobernador, lo que enardeció a la masa que ahí se concentraba para exigir que se llevara, en consecuencia, con las máximas autoridades locales: con el Gobernador y el Secretario de Salud. Esto se acordó como mesa de negociación para el día lunes 14 de junio, mismo que brinda una esperanza para la solución de las demandas de las manifestantes. Será también de provecho para las inconformes la visita del Presidente de la República el día 19 de junio al municipio de Jerez, en esta entidad, para transmitirle lo que aqueja al sector. Como consecuencia de la manifestación del día 11 de junio, se ha anunciado que les llegará el Bono COVID, lo que es entendido como un paliativo para la lucha, para calmar la flama que ya se ha encendido, pero que también es muestra de la capacidad de acción de este sector.
Este acontecimiento merece el aliento de la izquierda, de las organizaciones que se encargan de divulgar, fomentar y establecer a la lucha de clases como motor de la transformación de la realidad. Entablando, impulsando y difundiendo la lucha de estos sectores que se han visto abandonados tanto por la patronal como por sus sindicatos, y contribuir en la victoria de sus luchas. A su vez, es una advertencia a los gobernantes de la democracia burguesa, quienes ahora en la localidad siguen siendo del PRI, pero quienes en la siguiente administración serán de MORENA, de que hay una parte de las y los trabajadores que no se siente representada ni por sus sindicatos blancos ni por sus autoridades, pero que a pesar de las constantes y dirigidas amenazas, siguen en pie, en lucha por sus intereses, porque saben que no tienen nada que perder más que sus cadenas.