El pasado 9 de agosto del 2024, el Segundo Tribunal del Vigésimo Tercer Circuito determinó inconstitucionales los artículos 311, 312 y 313 que tipificaban el delito de aborto en Código Penal del Estado de Zacatecas. Esto obliga de manera categórica al Congreso del Estado a legislar en favor del aborto consentido y autoprocurado.

Escrito por Rosa, Feminismo Socialista México. 

Zacatecas se ha convertido en el dieciseisavo estado de la República en despenalizar por vía judicial el aborto voluntario, el cual era condenado con 4 meses a un año de prisión a quien lo efectuase, consintiese o cooperase en el acto. Cabe destacar que la condena podía aumentar si el procedimiento era practicado en contra de la voluntad de la persona embarazada, pero también se sostenía que la duración de la pena podía mantenerse en el lapso ya mencionado si el producto en gestación era “fruto de una unión ilegítima”, si el aborto era realizado en los primeros cinco meses de embarazo, o si quien se lo realizaba no contaba con “mala fama” (H. Quincuagésima Primera Legislatura del Estado Libre y Soberano de Zacatecas [LIL],1986, art. 311). En el mismo documento se establece que el aborto no sería castigado si fuese ocasionado por causa natural, violación o riesgos a la salud de la persona embarazada (LIL, 1986, arts.312-313).

Cómo es posible observar, el discurso sostenido por las autoridades en el Código Penal comprende una visión cargada de prejuicios morales y una carente perspectiva sobre los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres y personas gestantes, no sólo coaccionando su capacidad de decidir sino también condenando a quienes lo hicieran bajo parámetros tales en los que hay que investigar si se trata de una persona con una reputación venerable o por el contrario, de alguien que no entrase o desafiara el canon de perfección mariana.

El proceso para la despenalización del aborto ha sido para Zacatecas una lucha constante y desde diversos frentes, enfrentándose no sólo a un narcoestado patriarcal, sino también al arraigo religioso mediante el cual la Iglesia católica persiste en su intento por impedir y obstaculizar el avance de la marea verde. Aunque en diversas declaraciones las autoridades eclesiásticas han negado su capacidad de convocatoria y de influencia en la opinión pública, se han denunciado en reiteradas ocasiones los llamamientos del Obispado a detener o desestimar el derecho al aborto, los cuales se han materializado en movilizaciones conservadoras pro nacimiento en las calles.

Pese a que después de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sobre la inconstitucionalidad del aborto como delito en 2021, las autoridades zacatecanas se sumaran a esta postura, los diálogos en torno al tema no se tradujeron en acciones concretas. Es finalmente con el amparo interpuesto desde el año pasado por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) y la colectiva Adornos del Semidesierto A.C., que el Congreso se verá obligado a legislar en favor de la despenalización, considerando una reforma al Código Penal y buscando a su vez asegurar el acceso seguro y gratuito al aborto en el Estado.

El posicionamiento por parte de las agrupaciones feministas del estado ha sido, por supuesto, de celebración y orgullo por el logro que no es sino producto del reclamo social que durante décadas se ha realizado. A su vez, se comparte también el enorme descontento con la actuación del actual gobierno presidido por David Monreal, especialmente por el hostigamiento y el maltrato contra las manifestantes, a las madres de lxs desaparecidxs, al tratamiento de los casos de feminicidio, en general, a su absoluta ignorancia e incompetencia en materia de violencia y género. Por lo cual, resulta importante reivindicar este triunfo como uno de la clase trabajadora en su conjunto, pero sobre todo de las mujeres y cuerpos feminizados, quienes vemos en el acceso al aborto seguro, gratuito y descriminalizado un avance más para la superación de los modos de reproducción sexual impuestos por el capitalismo moderno. 

Ahora bien, con la declaración de inconstitucionalidad del aborto como delito por la vía judicial como hecho, queda continuar presionando a lxs congresistas para que se hagan las modificaciones pertinentes, pero también para que esto se refleje en políticas públicas asertivas que permitan a quien lo desee acceder a la interrupción del embarazo, de manera segura, gratuita, informada y acompañada en las instituciones de salud.

Resulta importante al momento de hablar sobre el aborto se le trate como un asunto de salud pública pues, aunque es una práctica usual así fuera o no legal, este se ha visto siempre atravesada el nivel socioeconómico, el acceso a la información, el estigma, la marginación y la carencia o negación de los servicios de salud adecuados para ello. Es así que quienes usualmente se ven más afectadas por los riesgos de prácticas inseguras y sus implicaciones sociales son las mujeres y personas gestantes de la clase proletaria, de la que formamos parte la mayor parte de la población en México y en el mundo, por lo que el asunto trasciende la individualidad para convertirse en uno de carácter colectivo.

Desde ROSA, nos sumamos a la celebración por la despenalización del aborto en Zacatecas, que representa la suma de esfuerzos e iniciativas de las feministas zacatecanas a lo largo de décadas, y que este 2024 se traduce finalmente en la avanzada por nuestros derechos sexuales y reproductivos, y a la que debe dársele continuidad. Continuamos recalcando que se trata de nuestros derechos y que es obligación del gobierno legislar para que sea posible. 

Porque nadie tenga regresar a la clandestinidad ni a prácticas inseguras nunca más, por nuestro derecho a decidir y no morir, aborto legal, seguro y gratuito ya en todos los estados de la República Mexicana.

Fuente: H. Quincuagésima Primera Legislatura del Estado Libre y Soberano de Zacatecas (LIL). Código Penal para el Estado de Zacatecas. (17 de julio 1986). México. [ley&cual=103&tipo=pdf (congresozac.gob.mx)].