Tras su derrota nacional, la derecha mexicana contendrá en una de sus últimas fortalezas con un Morena que presenta lo peor del chapulineo, la desorganización y la traición a las demandas de sus bases.

Escrito por Alfredo Fernández, Alternativa Socialista

La situación de Morena en Coahuila no es muy distinta a la de Morena a nivel nacional: cooptada por el ala de derecha al mando de Mario Delgado, cientos de candidaturas han sido impuestas a elementos priístas y panistas que hace algunos meses se oponían a la Cuarta Transformación. Por ejemplo la denuncia de miembros de Morena al actual alcalde y candidato a reelección en Piedras Negras, Claudio Bres Garza, hace eco en la situación política actual que se desarrolla en el país con el proyecto político de Morena traicionando a sus bases. Militantes dentro del partido denuncian su “hechura neoliberal” y que su candidatura como alcalde de Piedras Negras en el 2018 fuera producto de que el expriista fue excluido para contender por cargos electorales dentro del PRI.

De igual manera en Monclova los militantes de Morena denuncian que no conocen a la candidata a la alcaldía, Cristina de la Rosa. Seleccionada cuando dos de los precandidatos salieran del partido por la inconsistencia en el proceso de selección de la candidatura a la alcaldía. Ahora postulados como candidatos de Fuerza por México y Unidad Democrática Coahuila, Cesar Flores Sosa y Gerardo Bortoni Gonzáles señalan nunca haber conocido a de la Rosa durante su militancia y lamentan que la localidad atraviesa una de las peores situaciones de la región al haber sido epicentro de la pandemia el estado.

En Saltillo, el candidato por parte del PRI  “Chema” Frausto Siller, abrió su campaña con la propuesta de no cambiar nada acerca del actual rumbo del presidente municipal priísta Manolo Jimenez. Cuyo plan de entregar la sociedad y vida común de la capital del estado a los poderes empresariales de la industria metalmecánica y automotriz ha dejado una profunda crisis en el área. En donde la poca movilidad y bienestar social cobra la vida de cientos de jóvenes anualmente.

Crisis que difícilmente podría ser atendida por el candidato de Morena, Armando Guadiana Tijerina, empresario y socio de minas de carbón en la región. Quien como presidente de la cámara de energía del senado impulsó el repunte de la producción de energía eléctrica a base de carbón en México. Y cuyas iniciativas como permitir el fracking sólo agudizan la crisis por el agua en la región del norte, al competir pequeños agricultores y ganaderos con la enorme cervecería de Constellation Brands en Piedras Negras y la industria metalmecánica en la región. Es casi tan inadecuado para encarar los problemas que afectan la región como lo ha sido en su silencio para pronunciarse ante las luchas sociales. Mientras la derecha intenta desarticularlas adueñándose de estos y presentando proyectos insuficientes para atender estas causas como lo fue la policía rosa en Saltillo o la limpieza del río Monclova.

Siendo esta última situación la que más se reproduce en Torreón, ya que al ser removida la candidatura de Luis Fernando Salazar por parte de Morena, ha quedado el campo libre para las campañas de Román Alberto por parte del PRI-PRD y Marcelo Torres del PAN, quienes han continuado con su campaña con vagos llamados a incrementar la seguridad, generar empleos temporales y limpiar la ciudad. Mostrando su profunda incomprensión del fenómeno de repunte de delitos menores o manifestaciones recientes como un síntoma del malestar social causado por décadas de proyectos neoliberales que arrasaron con la vida social de la ciudad.

El resto del panorama no pinta mejor para las localidades del estado. Los proyectos conservadores y neoliberales de la derecha , y sobre todo la ausencia de una organización clasista privaron al pueblo de una alternativa política con la cual articular sus necesidades, denuncias y demandas. Al respecto vale la pena recordar las elecciones estatales de 2017, cuando después de una jornada electoral llena de irregularidades, la coalición Frente por un Coahuila Digno presentó denuncias de hasta al menos 17 de estas. En lo que pasaría a ser uno de los movimientos recientes más importantes en la región, cientos de miles de ciudadanos se congregaron detrás de las consignas “Fuera el PRI”, “No somos acarreados”, “Recuperemos la libertad de elegir” desde Piedras Negras hasta Torreón. Demostrando el deseo de las masas de expresarse políticamente de manera efectiva.

En Alternativa Socialista entendemos que difícilmente el pueblo coahuilense encontrará una alternativa política en las urnas en las próximas elecciones. La urgencia de sacar al PRI del estado y seguir desmontando su hegemonía regional sólo se agrava frente a la necesidad de construir alternativas reales.

Es por esto que al mismo tiempo que llamamos a echar a la derecha de Coahuila, extendemos el llamado a redoblar los esfuerzos de las movilizaciones para continuar la lucha por una organización que realmente sea una alternativa para todas las clases oprimidas y marginalizadas de la sociedad coahuilense. Esfuerzos a los que nos sumaremos para exigir alternativas electorales reales y atender las demandas por las que sigue luchando el pueblo trabajador coahuilense. Para ello es indispensable construir una alternativa política organizada mediante un programa que enarbole las demandas de los trabajadores, las mujeres, los jóvenes, los campesinos, la comunidad LGBTQ y todos los oprimidos en el estado. Esto es precisamente lo que nos planteamos en Alternativa Socialista.