Recuento de lo vivido durante el Primer Congreso Nacional de Alternativa Socialista

La discusión de nuestro Primer Congreso Nacional de Alternativa Socialista, sección mexicana de Alternativa Socialista Internacional, ha sido no solo motivadora sino absolutamente clara y abierta, permitiendo reconocer las posibilidades y los límites de la situación nacional y mundial. Y especialmente cómo construir junto con nuestra clase una alternativa revolucionaria. 

Escrito por Paola Gracia, Alternativa Socialista (ASI en México). 

El día viernes 2 de julio de 2021, los camaradas de la sección mexicana nos reunimos en las instalaciones del SUNTUAP, en la ciudad de Puebla de Zaragoza a las 5 pm para escuchar la conferencia que los compañeros de Socialist Alternative, ASI en Estados Unidos, prepararon sobre la izquierda política en EEUU y los efectos de la pandemia en el corazón del imperialismo mundial. La pandemia ha sacado a relucir las diferencias sociales que anteriormente ya eran identificables, tanto en Seattle como en Minneapolis los compañeros han hecho un ardua labor por consolidar las bases de la organización y defender los intereses de la clase trabajadora. Uno de los puntos que desarrollaron es la naturaleza del capitalismo que una vez más ha dejado en claro quiénes serían favorecidos pues la pandemia ha dejado claro la creciente desigualdad entre los billonarios y la gente trabajadora. Un ejemplo fue el incremento de las mujeres que son violentadas en sus hogares o la discriminación racial a los afro descendientes. La pandemia también trajo una ola de polarización política, en donde los jóvenes buscan una segunda opción de izquierda para luchar. Es lo que explica por qué muchos jóvenes se integraron a la DSA con el fin de luchar por el socialismo. Sin embargo dentro de la DSA existe una deficiencia que hace que el partido tenga una confusión, pues una vez electos sus candidatos se mueven a la derecha, Lenin se refería a esto diciendo “entre más cerca estés del poder más propenso eres a que la presión te empuje a la derecha”. 

También se explicó que el racismo y sexismo son un problema del sistema, y que una muestra fue que los participantes de la huelga de Amazon estuvieron conectados con el movimiento Black Lives Matter, un movimiento importante en la historia de EEUU donde aproximadamente veinte ciudades se solidarizaron con la causa. Posteriormente hizo mención de lo que electoralmente sucede, cuando la izquierda no puede ayudar a la dirección de los movimientos sociales estos tienden a caer en manos de la derecha, incluso fomentar a la ultraderecha. Se requiere una organización para consolidar las demandas de un grupo, un ejemplo de esto fue Black Lives Matter, se tenía un fin pero no una organización interna, las personas salían y marchaban por dos semanas y eventualmente se cansaban, lo que desencadena en la disolución de dicha fuerza. La candidatura de Bernie Sanders, el candidato por el partido demócrata, demostró la necesidad de construir un partido para la clase trabajadora en Estados Unidos. Si bien Sanders mostró una posición diferente a lo que Donald Trump representaba, ya que trato de dar dirección a la izquierda en EEUU y por lo que muchos jóvenes se organizaron detrás de él con la finalidad de obtener una serie de derechos, su renuncia a luchar por la candidatura de manera independiente significó un paso atrás dejando todas estas organizaciones sin  una dirección. Su posición, como la de DSA que se hacen llamar socialistas, ha sido una posición conciliatoria con los demócratas, han elegido ceder ante los demócratas, lo que deja en la cuerda floja la lucha por la clase trabajadora. Por lo que es necesaria una alternativa que luche contra el sistema establecido. Por lo que ASI debe intervenir para construir una alternativa para las y los trabajadores, por ejemplo es necesario construir una alternativa electoral. Un ejemplo es la concejal de Seattle, Kshama Sawant, que lucha por conquistar las demandas de la clase trabajadora como el salario mínimo de 15 dólares e impulsa un programa socialista como el impuesto a Amazon para construir vivienda social.  

El sábado, 3 de julio, el primer día del Congreso Nacional se abordó la primera discusión de Perspectivas mundiales. En esta discusión se abordó la situación mundial de la lucha de clases, que en el contexto de la crisis económica y de salud producto de la pandemia de Covid 19, ha vuelto a demostrar el carácter parasitario y absolutamente decadente del capitalismo que ni siquiera puede asegurar una distribución justa de las vacunas. Junto con esto también, la pandemia ha mostrado el arrojo y determinación de miles de trabajadores y jóvenes en todo el mundo contra la muerte y la enfermedad, como lo muestra la lucha del sector médico en diferentes partes del mundo. 

La situación en América Latina, ha sido particularmente desastrosa producto de las décadas de recortes neoliberales a la salud que no han sido revertidos en todos los casos por los partidos progresistas. Un ejemplo claro de ello es Brasil, que se ha mantenido como uno de los países con el mayor número de contagios y muertes causadas por la pandemia y que ha puesto una vez más al gobierno de Bolsonaro en la cuerda floja, con una nueva crisis política tras hacerse pública la corrupción en la compra de vacunas que involucran al propio Bolsonaro. ¡Fuera Bolsonaro! ¡Fin al gobierno genocida! ha sido la consigna enarbolada por una nueva oleada de manifestaciones que han tenido lugar desde el 21 de junio. 

Pero el caso de Brasil no es el único en América Latina, con él están también los de Chile, Perú, Ecuador o Colombia que en los últimos meses han protagonizado algunas de las grandes batallas en el continente. La situación en Chile se planteó con la participación de una compañera de ese país quien explicó a detalle la situación abierta en ese país tras el estallido social del 18 de octubre y la reciente elección Constituyente, y que como señala la consigna “no son 30 pesos, son 30 años”. También se abordaron las manifestaciones y la represión que están viviendo Colombia, la “nueva guerra fría” entre China y Estados Unidos, el crecimiento de las tensiones en Medio Oriente entre una pandemia y una crisis entre países como lo son Palestina e Israel, la situación en África y como ha llevado la pandemia, la lucha de clases en EEUU y la situación política las el triunfo de Biden y las crecientes vacilaciones de Ocasio Cortez y The Squad. 

La crisis que siguió a la pandemia ha hecho visible la situación real de la sociedad, ha evidenciado las diferencias de clase, la desigualdad en la que en México el 1% de la población controla el 40% del PIB, mientras el 99% restante nos repartimos el 60% de la riqueza nacional. La vacuna, es otro ejemplo de esa desigualdad que el capitalismo ha tratado de solucionar disfrazándose de “cooperación internacional”. Estos ejemplos bastan para comprender porqué es necesario una organización que vele por los intereses de los trabajadores.  Tema que en el caso de México es particularmente importante dado el giro a la derecha de Morena, y los errores de la llamada 4T que pretende impulsar una ilusoria política para favorecer a los más pobres sin romper con el capitalismo, y que cada día deja más claro su imposibilidad. 

El día domingo, discutimos cómo construir Alternativa Socialista poniendo énfasis en la importancia de bases sólidas, principios claros y entusiasmo para construir un partido para los trabajadores, que se solidarice con las luchas de los oprimidos y sea un ejemplo de organización revolucionaria. Por último, pero no menos importante, discutimos el Programa de Alternativa Socialista para el próximo periodo a partir del estudio de las perspectivas para la lucha de clases en México.

Los compañeros asistentes participaron activamente durante estos tres días, y mostraron su entusiasmo por un cambio real, construido desde abajo, con militantes convencidos de lo que se puede lograr, y bajo qué medios se logrará. La discusión de nuestro Primer Congreso Nacional ha sido no solo motivadora, sino absolutamente clara y abierta, permitiendo reconocer las posibilidades y los límites de la situación nacional y mundial. Y especialmente cómo construir junto con nuestra clase. Como decía León Trotsky “exponer a los oprimidos la verdad sobre la situación es abrirles el camino de la revolución”. El entusiasmo recolectado en estos días, lo llevaremos presente en la construcción de AS México. 

¡Por una Alternativa Socialista para la clase trabajadora!