Elecciones en Puebla: entre el neo-morenovallismo y la izquierda paralítica

Las próximas elecciones en Puebla serán un nuevo punto de inflexión en la lucha de clases en el estado. Con Morena cada vez más cooptado por arribistas y oportunistas provenientes del PRI y el PAN, y una dirección que se niega a escuchar los reclamos de las y los militantes de base que han construido este partido.

Escrito por Christian Tello, Alternativa Socialista.

¿De dónde venimos?

MORENA en 2018 posicionó un candidato peculiar y absurdo para la cuarta transformación, Miguel Barbosa. Este personaje, miembro del círculo empresarial poblano con un patrimonio “oficial” valuado en 14.9 millones de pesos, colaborador de Moreno Valle en 2010, cacique local del PRD de 1998 a 2010, bizarro en su actuar y fue electo gobernador del estado de Puebla después de la muerte de Martha Érika Alonso (gobernadora por el PAN hasta el 24 de diciembre del 2018). Barbosa montado en el efecto MORENA y la figura de Andrés Manuel como nuevo proyecto de renovación social, logró arrasar con 14 diputaciones locales; lo que convirtió a MORENA dentro del Congreso del estado en la primera fuerza parlamentaria.

Sin embargo, el sentimiento de triunfo duró poco y se vislumbraron deprisa las contradicciones de la “izquierda poblana”. Solo recordemos que en marzo del 2020 la activista y defensora de desaparecidos María Luisa Nuñez, fue expulsada del Congreso y repudiada por el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Gabriel Biestro. Casos de corrupción dentro del municipio han surgido como el desvío de 70 millones de pesos en “máquinas de barrido”. La inoperante Plataforma Nacional de Transparencia del Estado. La posición hipócrita, paralítica y reaccionaria de los diputados de MORENA en colaboración con los partidos de derecha por echar freno o mantener en la nube las demandas de colectivos feministas y LGBTQ del estado durante la toma del congreso y las múltiples manifestaciones que sacudieron a la ciudad desde 2019 a la fecha. Hoy ya no es sorpresa que ex panistas salten a MORENA para competir en alcaldías municipales como es el caso de San Pedro Cholula por cortesía de Mario Delgado. 

Aún con sus tapujos la 4T en Puebla ha cedido a la apertura de las libertades democráticas y de legítima protesta, libertades que fueron socavadas por las persecuciones políticas del morenovallismo en el estado el sexenio pasado. Diferentes movilizaciones sociales se han manifestado en pro de empujar lo progresivo y denunciar las carencias de la 4T: manifestaciones feministas, luchas por la autonomía del agua en las comunidades nahuas y protestas estudiantiles por el aumento de la inseguridad en el estado.  La aprobación de la ley Agnes contra la discriminación de género como primer e importante avance en el reconocimiento de la comunidad trans. Más reciente, a fines de abril el Parlamento Abierto entre colectivos feministas y grupos conservadores provida ha logrado (contra las injurias de la anticuada derecha) que la iniciativa de la despenalización del aborto en el estado pase a pleno para ser discutida en el Congreso estatal. Esta es una muestra clara de la posibilidad de avanzar contra la derecha poblana sobre la base de la movilización.

Por su parte la mórbida pero débil derecha poblana, reunida bajo el pacto electoral de “Va por México”, parece intentar recuperar Puebla bajo la nostálgica idea de un neo morenovallismo. Solo recordemos que cuando el PAN gobernó este estado fue aprobada La Ley Bala, ley que permitía el uso de balas de goma contra manifestantes cobrándose la vida de un niño en San Bernardino Chalchihuapan durante protestas campesinas. El encierro de 366 activistas durante las huelgas magisteriales entre 2013 y 2018. El ecocidio durante la construcción de obras ilegales en reservas ecológicas como Flor del Bosque o el Parque Ecológica O la persecución de líderes sindicales, siendo el caso más sonado es el de Rubén Sarabia, dirigente de La Unión Popular de Vendedores Ambulantes, personaje aprendido con sus dos hijos y asesinada su hija en 2014. Los tratos turbios entre la mafia huachicolera y las familias de políticos priistas y panistas. La activa red de trata de blancas desde el sexenio de Mario Marin “El gober precioso” destapada por la periodista Lydia Cacho; red que aún hoy opera en la clandestinidad regional. No alcanzan las palabras en este artículo para evidenciar el TERROR en mayúsculas de los gober preciosos y morenovallistas que han pasado y amenazan con regresar a la administración del estado.

Morena, entre el oportunismo y el arribismo

En este contexto, se llevarán a cabo las elecciones donde se disputan en el estado 15 diputaciones federales; 41 diputaciones estatales: 26 por mayoría relativa y 15 por representación proporcional. 217 presidencias municipales, mil 810 regidurías, de las cuales mil 346 son regidurías de mayoría relativa y 464 regidurías de representación proporcional. En este proceso electoral el proyecto de alternancia morenista se encuentra en juego; y no lo está por la fuerza de oposición de derecha de la coalición “Va por México”, sino por la propia descomposición de MORENA, donde los cuadros de derecha “obradoristas” sigue brotando de la dirección estatal.

El conflicto de Morena en el estado está situado en tres personajes que representan las fracciones más grandes del partido; la Alcaldesa Municipal de Puebla Claudia Rivera, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política Gabriel Biestro y el Senador del estado Alejandro Armenta.

La alcaldesa desde el año pasado ha confrontado a la dirección del partido encabezada por Biestro como operador político de Miguel Barbosa; cabe recordar que Biestro durante su cargo como presidente estatal de MORENA dio luz verde a la candidatura de Miguel Barbosa para el proceso electoral a la gubernatura estatal en 2018. En el conflicto la alcaldía municipal ha impulsado posiciones feministas que han descolocado al congreso y el ejecutivo del estado, causando el demérito de toda la bancada que coordina Biestro junto con los intereses particulares del gobernador. Sin embargo, estas posiciones han sido limitadas pues no han pasado de las declaraciones, se han movilizado muy poco y no se han pronunciado públicamente a favor de las demandas de colectivos feministas referente al aborto legal y seguro. Solo se ha avanzado en este campo gracias al empuje de las compañeras en la calle.

Biestro, en las últimas semanas ha presentado impugnaciones a la Comisión Estatal Electoral donde pide que la candidatura por la reelección de Claudia Rivera en el municipio de Puebla sea denegada ya que dice, el proceso de selección y votación de las bases no fue transparente y presentó irregularidades que el propio Comité Nacional de MORENA escondió. Biestro pretendía competir por la candidatura de MORENA en el municipio de Puebla, sin embargo, los intereses y fuerza políticos de otra fracción del partido terminaron por debilitarlo. Alejandro Armenta, quien fue contendiente con Barbosa por obtener la candidatura en MORENA para gobernador en 2018, ha decidido mover discretamente sus fichas y recursos políticos para posicionarse como posible candidato a la gubernatura del estado en 2024. Sin embargo, esto afecta a los intereses caciquiles de Barbosa y las familias políticas de la región que lo respaldan. Esta es la situación de la mayor fuerza política en el estado y en el país.

La situación de la coalición de Va por México es lamentable. En el mes de marzo lanzaron oficialmente sus 15 candidaturas a diputaciones federales en las que integran figuras como Jesús Morales Rodríguez, ex colaborador de Rafael Moreno Valle y ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública durante los tratos secretos entre la policía estatal y las mafias huachicoleras al norte del estado. Ana Teresa Aranda, ex titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) investigada por el desvío de más de 200 millones de pesos en despensas y materiales de construcción durante su administración en 2005. Mario Riestra Peña, ex titular de la Secretaría General del Ayuntamiento de Puebla en el gobierno municipal de Gali Fayad y miembro de un clan familiar que operó durante el gobierno de Moreno Valle; este personaje desde 2019 ha estado fichado por la Fiscalía General del Estado por múltiples denuncias de corrupción en su contra, por fraude al erario tras la venta de los terrenos del parque Flor del Bosque y hoy la zona Audi a privados. Solo exponemos aquí algunos sonados nombres de candidaturas a las diputaciones federales que verifican la descomposición en que se encuentra la actual propuesta de oposición a MORENA.

Construyamos una Alternativa para el pueblo trabajador poblano

Estamos en medio de dos fuerzas que empujan a la derecha, una oficial representada por los partidos del antiguo régimen y la otra por el rapto de la dirección del movimiento obradorista a manos de oportunistas, chapulines y burócratas que se divorciaron de la clase trabajadora o simulan su compromiso con los movimientos y demandas sociales. Aún con el panorama de adversidades y la gran desconfianza que tenemos de todos los candidatos recordemos que la 4T no se encuentra perdida.

La burocracia de los Barbosa, los Biestro o las Rivera anula la voluntad y la capacidad de la base del proyecto obradorista para empujar las grandes transformaciones; solo logradas mediante el combate en la calle, en los comités de base, en las universidades, en los centros de trabajo, todo espacio que presente una ganada trinchera más para la clase trabajadora. Desde Alternativa Socialista planteamos bajo las condiciones particulares de cada estado, ni un voto a la derecha. Eso implica discutir y presionar a la dirección de MORENA en las organizaciones locales para deshacernos de los oportunistas. Pero para ello es indispensable organizarse para luchar por un partido de y para la clase trabajadora que impulse las demandas del pueblo trabajador.