Universidad Veracruzana: ¡Defendamos el 4% del presupuesto estatal para la Universidad!

El Consejo Universitario General determinó en 2022 que el presupuesto para 2023 sería de 8 mil 569 millones 392 mil pesos, a partir del artículo 10 de la Constitución de Veracruz que establece el 4% del presupuesto estatal para la Universidad. Sin embargo, en diciembre de 2022 el Congreso solo etiquetó 5 mil 844 millones de pesos para la universidad. A inicios de 2023, el CUG aceptó la propuesta del Congreso de otorgar 250 millones de pesos adicionales a la UV para resolver la controversia. Es decir, que este año 2023, la UV cuenta con un 29% menos del presupuesto del que le corresponde. ¡Faltan casi 2 mil 500 millones de pesos!

Escrito por Rolando Ramos, Alternativa Socialista (ASI en México)

En la última reunión extraordinaria del CUG, el 28 de agosto, se aprobó una primera fase de acciones para lograr el 4% constitucional para 2024. La propuesta del rector, Martín Aguilar, fue llevar a cabo una campaña, y explicó que “dicha campaña debe mostrar los resultados del trabajo que hacemos en los diversos terrenos de nuestro quehacer institucional, organizada y dirigida por las autoridades universitarias de las cinco regiones”. El 07 de octubre se tiene planeado entregar la solicitud del pliego para el presupuesto de 2024, a la par que continúa el diálogo con el Congreso local, el Gobierno del Estado y la Secretaría de Finanzas. “Me pronuncio por mantener la exigencia legal y legítimamente viable de que el Gobierno del Estado cumpla con lo establecido en la Constitución Política del Estado de Veracruz, y asigne a la UV el 4% de su presupuesto total”, declaró el rector frente a las autoridades universitarias y 343 consejeras y consejeros alumnos.

Sin duda esta resolución es un paso al frente en la postura de la UV en defensa de la educación pública. No obstante, durante la reunión, los representantes estudiantiles plantearon sus propias ideas sobre la campaña, pues un amplio sector entre las consejeras y consejeros opina que para conquistar el 4% es necesaria una movilización estudiantil de carácter combativo. Y si bien las y los estudiantes deberíamos apoyar y acompañar la campaña impulsada por el rector, es justo que marquemos nuestra diferencia en que debe ser “organizada y dirigida por las autoridades universitarias”, pues tenemos mucho que decir respecto a las carencias de la universidad, y dejar a un lado el ímpetu y la creatividad de la juventud sería dejar a un lado nuestras mejores armas para dar esta batalla. No será el carácter “constitucional y legal” del presupuesto lo que determinará que el mismo sea entregado a la universidad, sino la movilización y organización de estudiantes, profesores y trabajadores la que obtendrá estos recursos e incluso su ampliación pasando a un porcentaje mayor del presupuesto del estado. 

¡Defendamos la educación pública, luchemos por el incremento del presupuesto universitario!

No podemos ser indiferentes ante la negativa del Gobierno del Estado a conceder el presupuesto que le corresponde a la UV, pues lo que está detrás de la falta de recursos para la universidad es la falta de insumos, comedores, dormitorios y la precarización de profesores y trabajadores. Los recursos que se le dan a la UV se reflejan directamente en la calidad de vida de su comunidad, así como en el acceso a la educación superior para los hijos e hijas de la clase trabajadora.

Hace apenas un mes, estudiantes de posgrado marcharon frente al Palacio de Gobierno del Estado para protestar por el recorte de las becas de Conahcyt. Este recorte dejó a quienes contaban con la beca para cubrir sus gastos y dedicarse de tiempo completo a estudiar en una situación especialmente vulnerable. La presión que ejercieron movilizándose llevó al rector a negociar con Conahcyt, y de este modo quienes se movilizaron consiguieron recuperar el recurso de 80 programas. Aún hay alumnos afectados por esta situación, pero la conquista conseguida es un claro ejemplo de cómo, cuando luchamos, podemos ganar.

Este es un ejemplo de que es posible lograr el 4% del presupuesto estatal para la universidad, como propone el rector, pero sólo a condición de impulsar un movimiento en toda la universidad. Para ello es necesario formar asambleas democráticas en todas las facultades y centros, donde se discutan los problemas que aquejan a la comunidad para elaborar un pliego de demandas amplio en el que se vean reflejadas las necesidades de quienes conformamos a la universidad: estudiantes, profesores y trabajadores. Además, estas asambleas deberían elegir representantes para formar una Asamblea Universitaria donde se discutan y organicen las acciones centrales así como las demandas del conjunto de la comunidad universitaria. Solo con la movilización y organización de toda la universidad podremos no sólo conquistar el 4% del presupuesto estatal, sino incluso un presupuesto mayor que satisfaga las demandas de toda la comunidad. 

¡Solo con la movilización y organización lograremos conquistar nuestras demandas!