¿Cómo los socialistas derrotaron el intento de Amazon de comprar las elecciones de Seattle?

Kshama Sawant reelegida a pesar de que los PAC corporativos gastan $4 millones para comprar el concejo municipal

Publicamos este artículo sobre la elección en noviembre pasado de la consejal socialista Kshama Sawant en Seattle, Estados Unidos, publicado originalmente el 12 de noviembre de 2019, pues pese a los meses transcurridos creemos que la experiencia en Seattle resulta de gran interés y enorme valor para la lucha de los trabajadores de habla hispana.

Escrito por Socialist Alternative en Seattle, Alternativa Socialista Internacional en Estados Unidos.

A pesar de que las grandes empresas y Amazon fueron con toda su munición para respaldar a los candidatos corporativos en las siete campañas del concejo municipal, el electorado de Seattle rechazó el intento de Jeff Bezos de voltear el concejo hacia la derecha. En la carrera del concejo municipal más vista, más cara y más polarizada de Seattle en décadas, Kshama Sawant de Socialist Alternative ganó la reelección.

Después de los primeros resultados electorales de la noche, el miembro socialista del concejo municipal de Seattle quedó atrás por 8 puntos, con un 46% frente al 54% de Egan Orion, los medios corporativos y las grandes empresas parecían triunfalistas. Pero las boletas que llegaron tarde contadas en los días siguientes, dieron un dramático 60% hacia Kshama Sawant. Para el recuento del viernes por la noche, Sawant estaba por delante de Orión en 3,6 puntos porcentuales y con una ventaja de 1.515 votos, y es probable que ese número aumente un poco más en los próximos días.

Al declarar la victoria en una conferencia de prensa al día siguiente, Sawant dijo: “Estos resultados electorales son un repudio de la clase multimillonaria, del hombre más rico del mundo, de los negocios imobiliarios, del establishment”.

El sistema de votación por correo del estado de Washington permite a los votantes enviar sus boletas por correo hasta tres semanas antes del día de las elecciones. Los primeros en votar tienden a ser mayores y más ricos, y los que votan después son desproporcionadamente más jóvenes, de clase trabajadora e inquilinos, los que tienen más probabilidades de votar por candidatos socialistas. Este año, la votación tardía para Sawant fue más grande que nunca. Incluso nuestros críticos en los medios corporativos se vieron obligados a dar crédito a la operación récord de “alentar el voto” de Socialist Alternative.

La alta participación también fue impulsada por la base de movimiento y el apoyo que Sawant ha construido en los últimos seis años, a través de los cuales los trabajadores han obtenido victorias históricas como el salario mínimo de $15 de Seattle y las leyes que han marcado un hito en los derechos de los inquilinos.

Una creciente ola de indignación arrasó a Seattle en las últimas semanas de las elecciones después de que el inmenso PAC corporativo, ya sin precedentes, se vio aumentado por la “bomba de dinero” de un $1 millón que Amazon lanzó sobre Seattle el 14 de octubre. Esto llevó la contribución total de Amazon al PAC de la Cámara de Comercio de Seattle a $1,5 millones, y el gasto corporativo del PAC a más de $4,1 millones, ¡casi cinco veces el récord anterior!

En esta tan reñida campaña, Sawant había ganado el apoyo de una mayoría sustancial de los sindicatos de Seattle junto con una serie de importantes apoyos como Sierra Club, el periódico The Stranger y muchos líderes progresistas de la comunidad en la ciudad.

Pero después de la bomba de dinero de Amazon, varias figuras políticas nacionales importantes también dieron sus opiniones contra Jeff Bezos, causando  una ola de atención de los medios nacionales. La Junta Editorial del Wall Street Journal se quejó de que “Bernie Sanders tuiteó esta semana que el gasto de Amazon en Seattle fue ‘un ejemplo perfecto de la avaricia corporativa fuera de control que vamos a terminar’. Elizabeth Warren denunció a Amazon por ‘intentar inclinar las elecciones del Ayuntamiento de Seattle a su favor’ y agregó que ‘tengo un plan para sacar el dinero de la política’”.

Aunque el gasto masivo de Amazon fracasó con muchos votantes, los $1,5 millones compraron numerosos anuncios, correos y encuestadores pagados, lo cual influyó a muchas personas a votar por nuestro oponente respaldado por las corporaciones. Los voluntarios de nuestra campaña se encontraron muchas veces con estos ataques propagados a través de esta campaña corporativa durante las últimas semanas.

Para superar esas mentiras y ataques fueron cruciales las miles de conversaciones en las puertas y en las calles que los miembros de Socialist Alternative y voluntarios establecieron con los votantes.

¿Quién dirige nuestra ciudad?

Advirtiendo que los $1,5 millones de Bezos para derrotar a Sawant y otros progresistas podría fracasar, el columnista del Seattle Times Danny Westneat dijo: “[la elección] podría ser un referéndum sobre Amazon y el poder corporativo” (23/10/19).

Socialist Alternative había previsto el potencial para una ofensiva corporativa liderada por Amazon desde el primer día. En enero, Sawant declaró: “Lo que está en juego este año es quién dirige Seattle: Amazon y las grandes empresas, o la gente trabajadora”.

Los medios corporativos, con el Seattle Times a la vanguardia, emprendieron una implacable ofensiva de propaganda corporativa para culpar a Sawant y a otros llamados “ideólogos de izquierda” por el “rendimiento fallido del Ayuntamiento” al abordar la asequibilidad de la vivienda de Seattle y la crisis de la falta de vivienda: la principal preocupación para los votantes. El periódico anunció su apoyo a los candidatos respaldados por Amazon en todas las carreras de concejos municipales menos una, y los describió como los candidatos de “cambio”.

En realidad, la crisis de viviendas y la escasez de precios asequibles en Seattle es parte del fracaso global del capitalismo, que trata la vivienda como una mercancía para enriquecer a los especuladores multimillonarios, y no como un derecho humano básico. Los trabajadores tienen razón al enojarse por la inacción de las autoridades municipales, estatales y federales para abordar la crisis. Pero la culpa de esto viene directamente de un establishment político que es cómplice del poder corporativo, no en activistas y líderes políticos como Kshama Sawant que piden soluciones audaces como el control de alquileres y el cobro de impuestos a las grandes empresas para expandir la vivienda social masivamente.

El oponente elegido por los ejecutivos de Amazon para derrotar a Kshama fue Egan Orion, un candidato totalmente vendido a las grandes empresas que se hizo pasar por un “progresista” para ganar votos, pero cuya campaña fue impulsada por un tsunami de dinero corporativo. Esto incluyó tanto fondos masivos de PACs como también donaciones directas de los líderes de las grandes empresas, incluidos altos ejecutivos de Amazon, cabilderos de negocios inmobiliarios y republicanos ricos.

Un programa socialista 

La campaña de Sawant lideró la lucha por el control de alquileres en Seattle, aprovechando el impulso de nuestros muchos años de campaña sobre este tema, así como las victorias este año en Oregon, Nueva York y California. La demanda de control universal de alquileres en Seattle, sin escapatorias corporativas, dio energía a los trabajadores de todo el distrito y la ciudad, permitiendo a la oficina de Kshama juntar rápidamente 13,000 firmas en una petición por el control de los alquileres. Nuestra oficina socialista también organizó una manifestación masiva en julio a la que asistieron más de 400 personas, y finalmente  movilizamos a los trabajadores en Seattle a una reunión del comité del concejo municipal para presentar la ordenanza de control de alquileres. Todo ello ayudó a construir una poderosa dinámica que puso el control de alquileres en el centro del debate político en Seattle.

A pesar de que el año pasado nuestra propuesta de subida de impuestos sobre Amazon y otras grandes compañías fue derrotada, desde el comienzo de nuestra campaña hemos exigido la restauración del impuesto, así como una serie de otros impuestos sobre las grandes empresas y los ricos, en vez de gravar al  trabajador común, o a los propietarios de viviendas y pequeñas empresas. Aunque el opositor de Kshama bajo presión y en abstracto dijo apoyar”los impuestos progresivos”, rechazó el impuesto sobre Amazon, un requisito fundamental para sus partidarios corporativos, y al hacerlo reveló sus lealtades políticas corporativas.

La campaña de Sawant también luchó por un Nuevo Acuerdo Verde para los trabajadores, para proveer Seattle con un 100% de energía renovable en 2030, incluyendo una expansión masiva del transporte público, haciéndolo totalmente eléctrico y gratuito. La campaña también vinculó la lucha para evitar la catástrofe climática con la necesidad de llevar a las grandes corporaciones energéticas a la propiedad pública democrática y reestructurarlas para obtener energía limpia. Kshama habló junto a Tammy Morales y Shaun Scott en la huelga climática del 20 de septiembre, atrayendo a más y  más jóvenes y estudiantes universitarios a nuestra campaña y programa socialista para un Nuevo Acuerdo Verde.

El debate en la izquierda de Seattle

Una vez más, Seattle ha demostrado que los socialistas y los trabajadores pueden enfrentarse a los titanes corporativos más poderosos y ganar. Esta victoria debería dar confianza a los movimientos en todas partes, desde la reciente ola de protestas masivas contra la austeridad y por la democracia que se extienden por todo el mundo, hasta las huelgas climáticas juveniles, las batallas laborales y otras campañas electorales socialistas, incluida la lucha crucial de Bernie Sanders por la presidencia estadounidense.

Sin embargo, sería un gran error imaginar que se pueden obtener victorias similares simplemente a través de la determinación y la lucha. El análisis marxista en nuestras perspectivas por la campaña, programa y organización fueron esenciales en Seattle y serán vitales para derrotar el concentrado poder  de la clase capitalista en todas partes.

Los miembros de Socialist Alternative proporcionaron el pilar de esta campaña. Su energía, sacrificio personal y habilidades políticas construyeron con éxito lo que quizás haya sido la campaña electoral de base más poderosa en la historia de Seattle.

Llevamos nuestra política socialista a la gente común en el Distrito 3 con más de 1.000 voluntarios y miembros de SA llamando a más de 225.000 puertas y haciendo 20.000 llamadas telefónicas, a la vez que recaudamos más de $570.000. Rompimos todos los récords anteriores tanto en cantidad total de dinero recaudado come en número de donantes.

Nuestra capacidad para construir unidad con otras fuerzas de la izquierda también fue importante para nuestra victoria contra Bezos.

Al comienzo de la campaña electoral, una alianza de facto entre grandes empresas, líderes sindicales clave y la mayoría de las figuras políticas liberales se había unido para tratar de derrotar a Sawant y bloquear la elección de Shaun Scott, el candidato de Democratic Socialists of America en el Distrito 4.

En las primarias, con una avalancha de dinero corporativo en contra, años de ataques implacables en los medios corporativos, sin el respaldo de miembros del Ayuntamiento u otros políticos prominentes del Partido Demócrata, y con una sección de líderes sindicales respaldando a uno de los opositores, Sawant recibió solo el 37% de los votos. Aunque este resultado la puso más de 15 puntos por delante de Egan Orion, los medios corporativos pintaron su victoria en las elecciones generales como una posibilidad remota. Nuestra perspectiva era que para ganar las elecciones generales sería crucial exponer el carácter corporativo de la campaña de Orión y construir una unidad de izquierda contra el intento de Amazon de comprar el Ayuntamiento de Seattle.

La lucha por la unidad contra Amazon

A pesar del gran apoyo que Sawant tenía entre la clase trabajadora, si hubiéramos adoptado el enfoque de la mayoría de los líderes liberales y laborales tratando de evitar una confrontación directa con Amazon, sería probable que la estrategia de Jeff Bezos hubiera tenido éxito. No había nada automático en la desconfianza generalizada de la clase trabajadora hacia el poder corporativo, que se estaba organizando para un ataque coherente y coordinado.

De hecho, dada la dominación corporativa del sistema bipartidista la mayoría de las elecciones en los Estados Unidos no representan desafíos audaces de la clase trabajadora en contra del poder corporativo. De hecho, a pesar de que en Seattle las organizaciones locales del Partido Demócrata se han movido hacia la izquierda (bajo el impacto de Sanders y otros candidatos de izquierda), en la mayoría de los casos esto no se ha traducido en campañas electorales con fuertes combatientes de la clase trabajadora. .

En Socialist Alternative basamos nuestra estrategia electoral en la confianza de que la clase trabajadora y los jóvenes en Seattle eran capaces de derrotar a Amazon y las grandes empresas si se les ofrece un camino de lucha. Esto incluyó la necesidad de que la clase trabajadora presione desde abajo para empujar a los líderes progresistas y sindicales a unirse con nosotros en una lucha contra el establishment corporativo de Seattle.

La dinámica desatada después de las elecciones primarias confirmó nuestra estrategia. Los candidatos respaldados por Amazon y las grandes empresas pasaron a las elecciones generales en las siete carreras del Ayuntamiento, enfrentándose a candidatos más progresistas. Con la amenaza inminente de que la Cámara de Comercio tome control generalizado del Ayuntamiento, nuestra demanda de la máxima unidad contra las grandes empresas rápidamente ganó fuerza entre los activistas de base, poniendo presión sobre los grandes actores políticos.

Líderes y grupos progresistas que se habían mantenido al margen en las primarias empezaron a apoyar a Swant y Shaun Scott. El escandaloso esfuerzo de los líderes sindicales conservadores para ganar el respaldo del Consejo Laboral para Egan Orion fue derrotado cuando más de 300 miembros de distintos sindicato firmaron una carta abierta en protesta. Y en una muestra importante de la unidad de la izquierda organizamos un evento conjunto con discursos de Sawant, Morales y Scott para promover un Nuevo Acuerdo Verde para Seattle. .

En septiembre, los grupos locales del Partido Demócrata respaldaron tanto a Kshama Sawant como a Shaun Scott (ya habían respaldado a Morales en las primarias) en lo que supuso una importante derrota del establishment demócrata, que durante años ha dominado la política de la ciudad gracias al respaldo de los grandes negocios y corporaciones. Sawant es la primera socialista independiente que ha sido respaldada por los demócratas de Seattle, y esto se ha logrado a pesar de sus muy públicos llamamientos para que demócratas, trabajadores y movimientos sociales de izquierda se unan para construir un nuevo partido para los trabajadores. Esta victoria fue el producto de un enérgico esfuerzo de base, que incluyó la aprobación de resoluciones condenando el gasto corporativo de PAC en estos grupos locales del Partido Demócrata.

Todo esto abrió la puerta para que nuestra campaña de reelección se convirtiera en la fuerza impulsora central detrás de una respuesta unificada en cuanto Amazon lanzó su bomba de dinero de $1 millón el 14 de octubre. Junto a los grupos del Partido Demócrata, organizamos una conferencia de prensa dos días después fuera de la sede de Amazon, seguida de una manifestación organizada por los trabajadores de Amazon una semana después.

Siguió una ola de cobertura de los medios nacionales. En un cambio radical de posición, incluso Lorena González y Teresa Mosqueda, los miembros liberales del Ayuntamiento que habían pedido públicamente la derrota de Sawant en las primarias, se sintieron obligados a hablar en la manifestación contra Amazon y anunciar su respaldo tanto a Sawant como a Scott.

Nuestra estrategia del frente unido movilizando la ira de la clase trabajadora y unificando la oposición más amplia contra el intento de toma de control corporativa ayudó a dar el golpe final a Bezos.

El papel de Socialist Alternative, con nuestro claro análisis, estrategia y enfoque de lucha de clases, fue central para el éxito de esta campaña histórica. A medida que la ola de campañas electorales socialistas se extiende por todo el país, esperamos que las ricas lecciones de cómo derrotamos a Jeff Bezos en su ciudad natal ayuden a los trabajadores a desarrollar estrategias ganadoras para sus luchas en todas partes.