Elecciones en la Ciudad de México: El retroceso de la izquierda abre paso a la derecha

Las elecciones intermedias en México en las cuales, en la Ciudad de México, se disputaron los puestos por la dirigencia de las alcaldías y el Congreso local han sido sin duda una sorpresa para propios y ajenos. Varias encuestas durante el periodo de campaña habían proyectado que los y las candidatas de Morena ganarían la mayoría de las alcaldías, y mantendrían la mayoría en el Congreso de la Ciudad, por lo que los resultados sorprendieron tanto a Morena y sus simpatizantes como a la oposición.

Escrito por Alternativa Socialista, ASI en México.

Sin embargo, aunque la derecha ha logrado hacerse de la mitad de la capital esta no ha logrado convencer realmente a una mayor capa de capitalinos en relación con los resultado que obtuvieron en 2018. Por el contrario, parcialmente ha retrocedido en términos absolutos con una menor cantidad de votantes. Aun así, han logrado ganarle a Morena quien solo atino a enfatizar su apoyo a López Obrador sin plantear un programa que se planteará la solución de las demandas de las y los trabajadores de la capital. Esto se explica principalmente a que PRI y PAN sumaron fuerzas para enfrentarse a Morena, con lo cual han logrado parcialmente derrotarla en las alcaldías donde han obtenido una mayoría.

Un doloroso revés en las Alcaldías

De las once alcaldías que Morena había ganado en 2018, tras estas elecciones perdió seis. Lo que significó una victoria para la alianza Va por la CDMX (PAN, PRI y PRD) en la mayoría de las alcaldías. Sin embargo, estos resultados no eran completamente impredecibles, son el resultado de la selección e imposición de candidatos impresentables por parte de Morena. Como Víctor Hugo Romo, candidato por la reelección a la alcaldía Miguel Hidalgo, quien no asistió a ningún debate durante su campaña, pero asistió a reuniones con empresarios de las zonas privilegiadas de su alcaldía, dejando en claro su poco compromiso con la clase trabajadora.

Otro ejemplo es la candidata por la alcaldía Cuauhtémoc,  Dolores Padierna, quien tiene un pasado lleno de escándalos de corrupción junto con su esposo, René Bejarano. En la alcaldía Álvaro Obregón, el candidato Eduardo Santillán cuenta con denuncias por trata de personas y existen dos carpetas de investigación en la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México a su nombre por este delito. Sin mencionar el abandono de la alcaldía de Layda Sansores, quien renuncio al cargo por el cual había sido electa en 2018 para competir por la gubernatura de Campeche.

Por otra parte Patricia Ortiz, candidata por la reelección en la Magdalena Contreras, se enfrentó a la indignación de los habitantes de su alcaldía, que en diciembre de 2020 en plena emergencia por la COVID-19, se registró un gasto millonario e irregular por sillas plegables. En Tlalpan, la alcaldía más grande de la ciudad, la candidatura de Gabriela Osorio se vio afectada por la pésima gestión de Patricia Acevedo, su compañera de partido, y a pesar de deslindarse de sus acciones, Osorio no consiguió revertir el descredito de la gestión anterior. En Azcapotzalco, Vidal Llerenas quien también buscaba la reelección, perdió resultado de una gestión con gastos irregulares y repuntes de agresiones sexuales en el territorio. Por último, en Xochimilco, Morena venció a sus opositores con una ventaja de apenas 1392 votos, por lo que un recuento a solicitud de la oposición es muy probable.

Congreso local y federal

A pesar de que Morena logró mantener la mayoría en el Congreso de la Ciudad de México, éste se ve debilitado, al pasar de 31 de las 33 diputaciones en 2018 a sólo 19 en estas elecciones. Perder dominio sobre la mayoría de las alcaldías que históricamente habían sido gobernadas por partidos de “izquierda” es consecuencia de la ineficiente campaña del partido encabezado por Mario Delgado, la cual se limitó a promover el voto basándose en el apoyo a “ya sabes quién”.

Por otra parte, igual que con la perdida de las alcaldías se han perdido posiciones importantes en el Congreso federal. Sin duda el triunfo de Margarita Zavala y el de Gabriel Quadri, quien derroto a Pablo Gómez en el Distrito 23 de Coyoacán, son los más significativos. La derrota de Pablo Gómez y de Alfonso Ramírez Cuellar, son un revés de importancia por el papel que ambos jugaban en la Cámara de Diputados. Basta recordar que Ramírez Cuellar, era el principal impulsor de la reforma fiscal progresiva, que aportaría una cantidad importante de recursos al Gobierno Federal. Ahora con su derrota, queda en vilo la posibilidad de impulsar dicha reforma.

Esta derrota deben de ser un llamado a Morena para hacerse una autocrítica real y profunda, y dejar de culpar únicamente a la guerra sucia de la derecha y a las “clases medias” por los pobres resultados obtenidos. Precisamente esa actitud acrítica es la que explica los resultados en la Ciudad, no tanto por el avance de la derecha como por la abstención en los distritos populares que podrían haber revertido el peso de la derecha, que resulta de la imposición de candidatos impresentables e incluso abiertamente de derecha así como la justificación de claros errores de la 4T, como las declaraciones equivocadas de López Obrador y la política migratoria en la frontera sur.