El acuerdo con el FMI anunciado por Alberto Fernández, termina de convalidar la fraudulenta deuda externa contraída por el gobierno de Macri. Una vez más será el pueblo trabajador quién pagará con más ajuste la fiesta de los banqueros y empresarios que fugaron los dólares.

Escrito por Marcos Ariel, simpatizante de ASI en Argentina.

Conocida la noticia todos los representantes patronales salieron a dar su apoyo, la Unión Industrial Argentina, la Sociedad Rural, la Bolsa de Valores, entre otros e incluso la traidora burocracia sindical. Si bien todavía no se conoce la letra chica del acuerdo y será tratado en el congreso es un hecho que la oposición de derecha votará a favor. Por otra parte la ultraderecha de Javier Miley y Espert en su rol de sirvientes de la patronal no apoyan en el acuerdo porque es muy “light” y no ajusta más.

Aunque ni el presidente ni el ministro de economía lo dijeron, se profundizará el ajuste puesto que el objetivo es reducir el déficit fiscal hasta el 2024. Eso significa que tendremos menos presupuesto para salud, educación, jubilaciones, planes sociales y el escaso dinero para combatir la violencia de género será más escaso aún. También aumentarán las tarifas de electricidad y gas. Además con la reducción de la brecha cambiara el dólar aumentará más su precio devaluando aún más nuestra moneda, lo que significará más pérdida de valor adquisitivo de los ya magros salarios, haciendo que la inflación se dispare para beneficio de las grandes empresas.

Por otra parte significará más extractivismo y entrega de los bienes naturales. Intentarán avanzar con la zonificación minera en la Patagonia, la exploración sísmica en el mar argentino, el fracking y seguirán los incendios del bosque nativo para ampliar los cultivos de soja y maíz. Todo sea para exportar más y juntar los dólares para la deuda.

Además nos endeudamos para pagar la deuda. “El acuerdo de facilidades extendidas” significa que el FMI prestará la plata para pagar la deuda que tenemos con el FMI. Eso sí, en una pérdida de soberanía cada 3 meses el Fondo Monetario auditará las finanzas del país para asegurarse de cobrar hasta el último dólar.

Con el 40% de la población viviendo en la pobreza, la prioridad no puede ser pagarle al FMI, la única deuda es la deuda interna con los el pueblo pobre con los niños y adolescentes a quienes se les hipoteca el futuro. Por eso la única salida es movilizarse para tirar abajo este acuerdo y que no vaya un solo dólar para el FMI.

Los únicos que nos oponemos a este acuerdo somos la izquierda, por eso el FIT-U debe ponerse al frente de organizar esta pelea, fundamentalmente en las calles, en los sindicatos y en las organizaciones de base de la clase trabajadora. Es muy importante la convocatoria a la reunión abierta para organizar una masiva movilización en contra del FMI. Pero esta debe ser un primer paso para avanzar hacia la construcción de una herramienta política unitaria de los trabajadores para ser alternativa de gobierno y terminar con este modelo de entrega y miseria.